1 Corintios es una carta del apóstol Pablo a la iglesia en Corinto, abordando temas de división, inmoralidad y confusión sobre los dones espirituales. Pablo enfatiza la importancia de la unidad en Cristo, el poder del amor y la resurrección de Jesús. Proporciona orientación sobre asuntos prácticos como el matrimonio, la adoración y la Cena del Señor. Los lectores aprenden sobre vivir una vida que refleje los valores cristianos, la importancia de la madurez espiritual y el poder transformador del amor y la fe en la comunidad.
1. PABLO, llamado á ser apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y Sóstenes el hermano,2. A la iglesia de Dios que está en Corinto, santificados en Cristo Jesús, llamados santos, y á todos los que invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo en cualquier lugar, Señor de ellos y nuestro:3. Gracia y paz de Dios nuestro Padre, y del Señor Jesucristo.
1. ASÍ que, hermanos, cuando fuí á vosotros, no fuí con altivez de palabra, ó de sabiduría, á anunciaros el testimonio de Cristo.2. Porque no me propuse saber algo entre vosotros, sino á Jesucristo, y á éste crucificado.3. Y estuve yo con vosotros con flaqueza, y mucho temor y temblor;
1. DE manera que yo, hermanos, no pude hablaros como á espirituales, sino como á carnales, como á niños en Cristo.2. Os dí á beber leche, y no vianda: porque aun no podíais, ni aun podéis ahora;3. Porque todavía sois carnales: pues habiendo entre vosotros celos, y contiendas, y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?
1. TÉNGANNOS los hombres por ministros de Cristo, y dispensadores de los misterios de Dios.2. Mas ahora se requiere en los dispensadores, que cada uno sea hallado fiel.3. Yo en muy poco tengo el ser juzgado de vosotros, ó de juicio humano; y ni aun yo me juzgo.
1. DE cierto se oye que hay entre vosotros fornicación, y tal fornicación cual ni aun se nombra entre los Gentiles; tanto que alguno tenga la mujer de su padre.2. Y vosotros estáis hinchados, y no más bien tuvisteis duelo, para que fuese quitado de en medio de vosotros el que hizo tal obra.3. Y ciertamente, como ausente con el cuerpo, mas presente en espíritu, ya como presente he juzgado al que esto así ha cometido:
1. ¿OSA alguno de vosotros, teniendo algo con otro, ir á juicio delante de los injustos, y no delante de los santos?2. ¿O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, ¿sois indignos de juzgar cosas muy pequeñas?3. ¿O no sabéis que hemos de juzgar á los ángeles? ¿cuánto más las cosas de este siglo?
1. CUANTO á las cosas de que me escribisteis, bien es al hombre no tocar mujer.2. Mas á causa de las fornicaciones, cada uno tenga su mujer, y cada una tenga su marido.3. El marido pague á la mujer la debida benevolencia; y asimismo la mujer al marido.
1. Y POR lo que hace á lo sacrificado á los ídolos, sabemos que todos tenemos ciencia. La ciencia hincha, mas la caridad edifica.2. Y si alguno se imagina que sabe algo, aun no sabe nada como debe saber.3. Mas si alguno ama á Dios, el tal es conocido de él.
1. ¿NO soy apóstol? ¿no soy libre? ¿no he visto á Jesús el Señor nuestro? ¿no sois vosotros mi obra en el Señor?2. Si á los otros no soy apóstol, á vosotros ciertamente lo soy: porque el sello de mi apostolado sois vosotros en el Señor.3. Esta es mi respuesta á los que me preguntan.
1. PORQUE no quiero, hermanos, que ignoréis que nuestros padres todos estuvieron bajo la nube, y todos pasaron la mar;2. Y todos en Moisés fueron bautizados en la nube y en la mar;3. Y todos comieron la misma vianda espiritual;
1. SED imitadores de mí, así como yo de Cristo.2. Y os alabo, hermanos, que en todo os acordáis de mí, y retenéis las instrucciones mías, de la manera que os enseñé.3. Mas quiero que sepáis, que Cristo es la cabeza de todo varón; y el varón es la cabeza de la mujer; y Dios la cabeza de Cristo.
1. Y ACERCA de los dones espirituales, no quiero, hermanos, que ignoréis.2. Sabéis que cuando erais Gentiles, ibais, como erais llevados, á los ídolos mudos.3. Por tanto os hago saber, que nadie que hable por Espíritu de Dios, llama anatema á Jesús; y nadie puede llamar á Jesús Señor, sino por Espíritu Santo.
1. SI yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo caridad, vengo á ser como metal que resuena, ó címbalo que retiñe.2. Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia; y si tuviese toda la fe, de tal manera que traspasase los montes, y no tengo caridad, nada soy.3. Y si repartiese toda mi hacienda para dar de comer á pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo caridad, de nada me sirve.
1. SEGUID la caridad; y procurad los dones espirituales, mas sobre todo que profeticéis.2. Porque el que habla en lenguas, no habla á los hombres, sino á Dios; porque nadie le entiende, aunque en espíritu hable misterios.3. Mas el que profetiza, habla á los hombres para edificación, y exhortación, y consolación.
1. ADEMÁS os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis;2. Por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano.3. Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo fué muerto por nuestros pecados, conforme á las Escrituras;
1. CUANTO á la colecta para los santos, haced vosotros también de la manera que ordené en las iglesias de Galacia.2. Cada primer día de la semana cada uno de vosotros aparte en su casa, guardando lo que por la bondad de Dios pudiere; para que cuando yo llegare, no se hagan entonces colectas.3. Y cuando habré llegado, los que aprobareis por cartas, á éstos enviaré que lleven vuestro beneficio á Jerusalem.