Filipenses es una carta del apóstol Pablo a la iglesia en Filipos, escrita desde la prisión. Irradia alegría y gratitud, enfatizando la importancia de la unidad y la humildad entre los creyentes. Pablo anima a los filipenses a regocijarse en el Señor, encontrar contentamiento en todas las circunstancias e imitar la humildad de Cristo. También subraya la importancia de vivir una vida digna del Evangelio y confiar en la provisión de Dios. A través de su ejemplo personal, Pablo inspira a los lectores a permanecer firmes en su fe.
Pablo
Apóstol de los gentiles, escribió muchas epístolas
1.
PABLO y Timoteo, siervos de Jesucristo, á todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos, con los obispos y diáconos:
2.
Gracia sea á vosotros, y paz de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
3.
Doy gracias á mi Dios en toda memoria de vosotros,
1.
POR tanto, si hay alguna consolación en Cristo; si algún refrigerio de amor; si alguna comunión del Espíritu; si algunas entrañas y misericordias,
2.
Cumplid mi gozo; que sintáis lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa.
3.
Nada hagáis por contienda ó por vanagloria; antes bien en humildad, estimándoos inferiores los unos á los otros:
1.
RESTA, hermanos, que os gocéis en el Señor. A mí, á la verdad, no es molesto el escribiros las mismas cosas, y para vosotros es seguro.
2.
Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos del cortamiento.
3.
Porque nosotros somos la circuncisión, los que servimos en espíritu á Dios, y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la carne.
1.
ASÍ que, hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía, estad así firmes en el Señor, amados.
2.
A Euodias ruego, y á Syntychê exhorto, que sientan lo mismo en el Señor.
3.
Asimismo te ruego también á ti, hermano compañero, ayuda á las que trabajaron juntamente conmigo en el evangelio, con Clemente también, y los demás mis colaboradores, cuyos nombres están en el libro de la vida.