La cuestión de si el Corán se considera verdadero en el cristianismo es compleja y matizada, reflejando la relación teológica e histórica más amplia entre el cristianismo y el islam. Como pastor cristiano no denominacional, es esencial abordar este tema con respeto y una comprensión profunda de ambas tradiciones de fe.
El cristianismo y el islam son dos de las principales religiones monoteístas del mundo, cada una con sus propios textos sagrados, principios teológicos y narrativas históricas. El cristianismo se basa en las enseñanzas de Jesucristo, tal como se registran en la Biblia, que comprende el Antiguo y el Nuevo Testamento. El islam, por otro lado, se basa en las enseñanzas del Profeta Muhammad, tal como se registran en el Corán.
Desde una perspectiva cristiana, la Biblia se considera la Palabra de Dios inspirada y autoritativa. Según 2 Timoteo 3:16-17 (NVI), "Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra." La Biblia, por lo tanto, ocupa un lugar central en la fe y la práctica cristiana.
El Corán, aunque es muy venerado en el islam como la revelación final y completa de Dios (Alá) a la humanidad, no se considera parte del canon cristiano. Los cristianos creen que la Biblia contiene la revelación completa y suficiente de la voluntad de Dios para la humanidad. El Nuevo Testamento, en particular, se ve como el cumplimiento de las profecías del Antiguo Testamento y la culminación del plan redentor de Dios a través de Jesucristo. Hebreos 1:1-2 (NVI) dice: "En el pasado Dios habló a nuestros antepasados por medio de los profetas en muchas ocasiones y de diversas maneras, pero en estos últimos días nos ha hablado por medio de su Hijo, a quien designó heredero de todo, y por medio de quien también hizo el universo."
Aunque los cristianos respetan el Corán como un texto religioso significativo para los musulmanes, no lo consideran divinamente inspirado o autoritativo de la misma manera que consideran la Biblia. Esta distinción se basa en diferencias teológicas fundamentales entre las dos religiones. Por ejemplo, el Corán niega la divinidad de Jesucristo y la doctrina de la Trinidad, que son centrales para la creencia cristiana. En Surah 4:171 (Sahih International), el Corán dice: "¡Oh, Gente del Libro! No cometáis excesos en vuestra religión ni digáis de Alá más que la verdad. El Mesías, Jesús, hijo de María, no fue más que un mensajero de Alá y Su palabra que Él dirigió a María y un alma [creada por un mandato] de Él. Así que creed en Alá y en Sus mensajeros. Y no digáis: 'Tres'; desistid - es mejor para vosotros. En verdad, Alá es un solo Dios. Exaltado sea Él por encima de tener un hijo."
En contraste, el Nuevo Testamento afirma la divinidad de Jesucristo y el concepto de la Trinidad. Juan 1:1-3 (NVI) declara: "En el principio ya existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba con Dios en el principio. Por medio de él todas las cosas fueron creadas; sin él, nada de lo creado llegó a existir." Además, Mateo 28:19 (NVI) registra el mandato de Jesús a sus discípulos: "Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo."
Estas diferencias doctrinales destacan por qué los cristianos no ven el Corán como verdadero en el mismo sentido que ven la Biblia. Sin embargo, es importante reconocer que esto no significa que los cristianos deban descartar o faltar al respeto al Corán. El diálogo interreligioso y la comprensión mutua son cruciales en nuestro mundo pluralista. Los cristianos están llamados a amar a sus vecinos, incluidos aquellos de otras religiones, y a participar en conversaciones respetuosas y significativas sobre sus creencias.
En su libro "Mero Cristianismo", C.S. Lewis enfatiza la importancia de buscar la verdad y la comprensión, afirmando: "Si eres cristiano, no tienes que creer que todas las demás religiones están simplemente equivocadas en todo. Si eres ateo, tienes que creer que el punto principal en todas las religiones del mundo es simplemente un gran error. Si eres cristiano, eres libre de pensar que todas esas religiones, incluso las más extrañas, contienen al menos algún indicio de la verdad."
Por lo tanto, aunque los cristianos no consideran que el Corán sea divinamente inspirado o autoritativo de la misma manera que la Biblia, aún pueden reconocer y respetar la importancia del Corán para los musulmanes. Participar en el diálogo interreligioso con un espíritu de humildad y un deseo de comprensión mutua puede ayudar a construir puentes y fomentar la coexistencia pacífica.
También vale la pena señalar que tanto el cristianismo como el islam comparten algunos puntos en común. Ambas religiones creen en un Dios que es el Creador del universo, la importancia de la oración, la práctica de la caridad y la necesidad de una vida moral. Estos valores compartidos pueden servir como base para un diálogo respetuoso y cooperación.
En conclusión, desde una perspectiva cristiana no denominacional, el Corán no se considera verdadero de la misma manera que la Biblia. La Biblia se ve como la revelación completa y autoritativa de la voluntad de Dios, mientras que el Corán se considera un texto religioso significativo para los musulmanes pero no divinamente inspirado según la creencia cristiana. Sin embargo, los cristianos están llamados a relacionarse con personas de otras religiones con respeto, amor y una disposición a entender sus creencias. Al hacerlo, podemos promover la paz y el respeto mutuo en nuestro mundo diverso.