La Traducción de la Pasión (TPT) ha generado tanto interés como controversia desde su creación. Como pastor cristiano no denominacional, es importante abordar esta cuestión con una perspectiva equilibrada, considerando tanto los aspectos académicos como devocionales de la traducción de la Biblia.
La Traducción de la Pasión fue creada por el Dr. Brian Simmons, quien tiene experiencia en lingüística y trabajo misionero. Su intención era proporcionar una versión de la Biblia que capturara la "pasión" y la intensidad emocional de los textos originales en un lenguaje contemporáneo y accesible. Este objetivo es loable, ya que muchas personas luchan con el lenguaje arcaico de las traducciones tradicionales y buscan una versión que hable directamente a sus corazones.
Sin embargo, la fiabilidad de cualquier traducción de la Biblia depende de varios factores críticos: precisión, fidelidad a los textos originales y rigor académico. Al evaluar TPT, debemos considerar estos factores en detalle.
Una de las principales preocupaciones con TPT es su enfoque de traducción. Las traducciones tradicionales de la Biblia, como la Nueva Versión Internacional (NIV), la Versión Estándar Inglesa (ESV) y la Nueva Biblia Americana (NASB), emplean un equipo de eruditos que trabajan en colaboración para asegurar que la traducción sea lo más precisa y fiel posible a los textos originales en hebreo, arameo y griego. Estas traducciones pasan por una rigurosa revisión por pares y se basan en los manuscritos más confiables disponibles.
En contraste, TPT es en gran medida el trabajo de un solo individuo, el Dr. Simmons. Aunque consulta a otros eruditos y recursos, la falta de un equipo colaborativo plantea preguntas sobre los controles y equilibrios que normalmente están presentes en otras traducciones. Esto no quiere decir que un solo traductor no pueda producir una obra valiosa, pero la sabiduría colectiva y el escrutinio de un equipo de expertos generalmente se consideran esenciales para producir una traducción de la Biblia confiable.
Además, el Dr. Simmons ha sido criticado por su enfoque interpretativo. Los críticos argumentan que a veces añade elementos interpretativos que no están presentes en los textos originales, ampliando así el significado de maneras que pueden no estar justificadas. Por ejemplo, al traducir la palabra griega "agape" (a menudo traducida como "amor"), TPT a veces añade adjetivos como "ardiente" o "intenso" que no están en los manuscritos originales. Si bien esto puede capturar el tono emocional que el Dr. Simmons percibe, también puede verse como una imposición de su lente interpretativa en el texto.
El rigor académico de TPT también ha sido cuestionado. Las traducciones tradicionales suelen ser producidas por comités de eruditos que se especializan en lenguas bíblicas, historia y teología. Estos eruditos a menudo tienen décadas de experiencia y numerosas publicaciones académicas a su nombre. Su trabajo está sujeto a revisión por pares y debe cumplir con altos estándares académicos.
El Dr. Simmons, aunque experimentado en lingüística y trabajo misionero, no tiene el mismo nivel de credenciales académicas que aquellos que típicamente producen traducciones de la Biblia. Su experiencia es más práctica que académica, y esto ha llevado a algunos a cuestionar si tiene la experiencia necesaria para emprender una tarea tan monumental por su cuenta.
Además, TPT no ha pasado por el mismo nivel de revisión académica que otras traducciones importantes. No ha sido ampliamente revisada por otros eruditos bíblicos, y esta falta de validación externa es una preocupación significativa para aquellos que priorizan el rigor académico en su elección de traducciones de la Biblia.
A pesar de estas críticas, muchas personas encuentran que TPT es un recurso devocional valioso. Su lenguaje contemporáneo y expresividad emocional pueden hacer que la Biblia se sienta más accesible y atractiva. Para aquellos que luchan con el lenguaje más formal de las traducciones tradicionales, TPT puede servir como un puente, ayudándoles a conectarse con las Escrituras de una manera más personal e inmediata.
Sin embargo, es importante reconocer la diferencia entre una paráfrasis devocional y una traducción formal. Paráfrasis como The Message de Eugene Peterson están explícitamente destinadas a transmitir el sentido y el espíritu del texto en un lenguaje contemporáneo, a menudo a expensas de la precisión estricta. TPT, aunque se comercializa como una traducción, a menudo funciona más como una paráfrasis en este sentido. Puede ser una herramienta útil para la reflexión personal y el crecimiento espiritual, pero no debe ser utilizada como una fuente principal para el estudio serio de la Biblia o la enseñanza doctrinal.
La integridad de las Escrituras es una preocupación fundamental para los cristianos. La Biblia se considera la Palabra inspirada de Dios (2 Timoteo 3:16), y cualquier traducción debe esforzarse por transmitir su mensaje de la manera más precisa y fiel posible. Si bien ninguna traducción es perfecta, el objetivo es minimizar la distancia entre los textos originales y el lector.
A la luz de esto, las expansiones interpretativas de TPT y la falta de validación académica son desventajas significativas. Si bien puede capturar el tono emocional que el Dr. Simmons cree que está presente en los textos originales, también corre el riesgo de introducir elementos subjetivos que pueden no estar justificados. Esto puede llevar a malentendidos e interpretaciones erróneas de las Escrituras, lo cual es una preocupación seria para cualquiera que busque entender la Palabra de Dios.
En resumen, La Traducción de la Pasión ofrece una interpretación única y emocionalmente atractiva de la Biblia que muchos encuentran útil para la lectura devocional. Sin embargo, su enfoque de traducción, la falta de rigor académico y las expansiones interpretativas plantean preocupaciones significativas sobre su fiabilidad como traducción principal de la Biblia. Para aquellos que buscan una comprensión más profunda y precisa de las Escrituras, es aconsejable usar TPT junto con traducciones más establecidas como la NIV, ESV o NASB. Estas traducciones han pasado por una rigurosa revisión académica y son ampliamente aceptadas por su fidelidad a los textos originales.
En última instancia, la elección de una traducción de la Biblia es una decisión profundamente personal, y diferentes traducciones pueden servir para diferentes propósitos. Si bien TPT puede ser una herramienta valiosa para la reflexión personal y el crecimiento espiritual, debe ser abordada con discernimiento y utilizada junto con traducciones más confiables para el estudio serio y la enseñanza doctrinal.