La cuestión de cuándo fue crucificado Jesús es una que ha intrigado a eruditos, teólogos y creyentes durante siglos. La Biblia proporciona varios detalles que nos ayudan a reconstruir la cronología de los eventos que condujeron a la crucifixión de Jesucristo. Para entender esto, necesitamos examinar cuidadosamente los relatos del Evangelio y considerar el contexto histórico y cultural de la época.
La crucifixión de Jesús es un evento central en la teología cristiana, marcando el clímax de Su ministerio terrenal y Su muerte sacrificial por los pecados de la humanidad. Los Evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan proporcionan diferentes perspectivas sobre los eventos de la Semana de la Pasión, pero convergen en los puntos clave que nos permiten establecer una cronología probable.
Los Evangelios Sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas) y el Evangelio de Juan coinciden en la secuencia general de eventos, pero difieren en algunos detalles. Según los Evangelios Sinópticos, Jesús compartió la Última Cena con Sus discípulos en la noche de la comida de la Pascua (Mateo 26:17-30, Marcos 14:12-26, Lucas 22:7-23). Esta comida se entiende tradicionalmente que tuvo lugar el 14 de Nisán, el primer mes del calendario judío, que corresponde a marzo o abril en el calendario gregoriano.
Después de la Última Cena, Jesús y Sus discípulos fueron al Jardín de Getsemaní, donde fue arrestado (Mateo 26:36-56, Marcos 14:32-50, Lucas 22:39-54). Luego fue llevado a la casa del sumo sacerdote para una serie de juicios ante las autoridades judías y finalmente ante el gobernador romano, Poncio Pilato (Mateo 26:57-27:26, Marcos 14:53-15:15, Lucas 22:54-23:25).
El Evangelio de Juan presenta una cronología ligeramente diferente. Según Juan, la Última Cena tuvo lugar antes de la Fiesta de la Pascua (Juan 13:1-2), y Jesús fue crucificado el día de la preparación para la Pascua (Juan 19:14). Esto sugiere que la crucifixión ocurrió el 14 de Nisán, mientras que los Evangelios Sinópticos implican que fue el 15 de Nisán.
A pesar de estas diferencias, los eruditos generalmente están de acuerdo en que Jesús fue crucificado un viernes. Esto se basa en los relatos del Evangelio que afirman que Jesús fue enterrado antes de que comenzara el sábado (Mateo 27:62, Marcos 15:42, Lucas 23:54, Juan 19:31). El sábado judío comienza al atardecer del viernes y termina al atardecer del sábado.
La hora del día en que Jesús fue crucificado también se menciona en los Evangelios. Marcos 15:25 afirma que Jesús fue crucificado a la tercera hora, que es aproximadamente las 9 AM según la cronología judía. Juan 19:14, sin embargo, menciona que Jesús todavía estaba ante Pilato a la sexta hora, o alrededor del mediodía. Esta discrepancia puede entenderse a la luz de las diferentes formas en que se contaba el tiempo en el mundo antiguo. El Evangelio de Juan puede estar usando la hora romana, lo que situaría a Jesús ante Pilato alrededor de las 6 AM.
Determinar el año exacto de la crucifixión de Jesús implica correlacionar los relatos del Evangelio con los registros históricos. La mayoría de los eruditos datan la crucifixión en el año 30 o 33 d.C. Este rango se basa en varios factores, incluyendo el reinado de Poncio Pilato como gobernador de Judea (26-36 d.C.) y datos astronómicos relacionados con la luna de la Pascua.
El historiador Flavio Josefo proporciona un contexto adicional al señalar que el mandato de Pilato terminó en el año 36 d.C. Dado que el ministerio de Jesús probablemente comenzó alrededor del año 27-29 d.C. y duró aproximadamente tres años, una fecha de crucifixión en el año 30 o 33 d.C. es plausible.
Más allá de los detalles históricos y cronológicos, la crucifixión de Jesús tiene un profundo significado teológico. Según la creencia cristiana, la muerte de Jesús en la cruz fue el sacrificio supremo por los pecados de la humanidad. El apóstol Pablo enfatiza esto en sus cartas, afirmando: "Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras" (1 Corintios 15:3).
La crucifixión también se ve como el cumplimiento de las profecías del Antiguo Testamento. Isaías 53:5-6 habla del siervo sufriente que es "herido por nuestras transgresiones" y "molido por nuestras iniquidades". El Salmo 22, que Jesús cita en la cruz (Mateo 27:46, Marcos 15:34), describe vívidamente el sufrimiento y la burla que Él soportó.
En resumen, aunque hay algunas diferencias en los relatos del Evangelio, la Biblia proporciona una narrativa coherente que sitúa la crucifixión de Jesús en un viernes durante el festival de la Pascua. El año es probablemente el 30 o 33 d.C., basado en datos históricos y astronómicos. Entender la cronología de la crucifixión nos ayuda a apreciar el contexto histórico de este evento crucial, pero más importante aún, profundiza nuestra comprensión de su significado teológico como el momento en que Jesús se ofreció a sí mismo como un sacrificio para la salvación de la humanidad.